Como dice Guadalupe Ramírez en su Crónica de Asfalto, al sureste de América Latina, el goce de uno de los derechos reproductivos de las mujeres, estaba en juego. La decisión sobre si el aborto sería ley o no en Argentina se discutió en el Senado de la Argentina, el pasado 8 de agosto. En la Argentina el aborto sólo es legal en casos de violación o cuando la vida de la madre corre peligro. Después de más de 12 horas de discusión, el Senado no aprobó la legislación que ya contaba con media sanción de la Cámara Baja con 38 votos en contra y 31 a favor al derecho de las mujeres Argentinas a decidir sobre su propio cuerpo.
En México, antes de que se diera la votación del Senado en la Argentina, las mujeres salieron a las calles en solidaridad con las mujeres argentinas y para hacer visible que en México también las mujeres mueren por abortos clandestinos.
Ciudad de México más verde que nunca
La movilización feminista unió a mujeres diversas, con ropa o pañuelos verdes –La Marea Verde, como se le nombró a este movimiento a favor del aborto legal–, con pancartas, mantas, mujeres de distintas edades, solteras, con hijos e incluso con nietos, entonaban sin parar: “¡Hay que abortar, hay que abortar, a este sistema patriarcal! ¡Aborto sí, aborto no, eso lo decido yo!”.
“La movilización surgió de distintivos puntos de la CDMX: Ciudad Universitaria, el Consulado de Argentina, el Ángel de la Independencia y el Monumento a la Madre. La meta: el Hemiciclo a Juárez.
Las organizadoras de este evento se dieron cita poco antes de las cuatro de la tarde en el Monumento a la Madre. Una integrante de cada grupo emitió los motivos del por qué el aborto debe ser ley en todo México —solo en la CDMX es legal desde 2008— al igual que en Argentina y toda América Latina”:
“Ante un gobierno que no nos representa y no atiende nuestras demandas, es indispensable sumar esfuerzos mediante una independencia política. Que la maternidad sea libre y voluntaria”, señaló la Organización Rosas Rojas.
Feministas Mexicanas contra Vientres de Alquiler denunció que “el aborto es una de los temas claves en los contratos de alquiler de vientres, es un derecho condicionado. No es casual que para satisfacer al cliente se garantice por contrato un bebé perfecto, genéticamente hablando, seleccionando sólo a los embriones que cumplan determinadas características, a los que estén mejor desarrollados y se deseche al resto. ¿Tiene derecho al aborto una mujer que gesta un hijo para otros?”.
Por su parte, la Coalición Regional Contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y el Caribe, (CATWLAC por sus siglas en inglés), dijo: “Hoy, 8 de agosto Rosas Rojas, FEMVA, CATWLAC y Feministas Independientes agrupadas en el Frente Feministas de a Pie, estamos aquí presentes en solidaridad con nuestras compañeras Argentinas, con su lucha por el aborto, legal seguro y gratuito; …este acto hace un llamado a todas las mujeres mexicanas para que comencemos a organizarnos y movilizarnos para conquistar el aborto legal, seguro y gratuito en todo México. No queremos más mujeres presas, ni más mujeres muertas por abortar clandestinamente. Estamos aquí para exigir una maternidad libre y voluntaria. El aborto será ley, en un país donde asesinan a siete mujeres cada día… Sabemos que esa batalla se va definir y ganar en las calles, producto de la movilización de millones de mujeres.” Y concluyó diciendo: “¡El único miedo que tenemos es a no luchar! ¡Educación sexual para decidir! ¡Anticonceptivos gratuitos para no Abortar! ¡Aborto Legal para no Morir! ¡Por el aborto libre, seguro y gratuito en todo México y América Latina! ¡Ni presas, ni muertas por abortar! ¡Por la aprobación del proyecto de ley del aborto legal en Argentina sin ninguna modificación! ¡Por una maternidad libre y voluntaria!”
“Se trata de hacer visible que las mujeres abortamos desde Physical therapy is probably the best alternative for viagra cheap canada men seeking to improve their sex life. These dysfunctions eventually increase the risk of an individual to develop levitra online depression in the long run. There are cialis levitra online many factors, responsible for men’s erectile dysfunction. The case consist two section of the penile packed with blood i.e. corpora cavernosa an erection commander cialis arises. el comienzo de la historia y lo seguiremos haciendo”, comentaron las integrantes de la Colectiva Feminista UAM Xochimilco. “Por ello es preciso que el Estado reconozca y garantice nuestro derecho a la vida, nuestro derecho a decidir sobre nuestros cuerpos y nuestras maternidades. El fomento y la calidad de una educación sexual y no sexista para decidir consciente y libremente, sin prejuicio. Este momento visibiliza una práctica que por mucho tiempo se ha mantenido en la clandestinidad y que pone en riesgo la vida y la salud de miles de mujeres”.
Las mujeres abortan con o sin aprobación del Estado
Muchas mujeres, tras ver la negativa de las instituciones de dar acceso a la salud, han estudiado el cómo y de qué manera pueden dar acompañamiento a quien no desea ser madre, llevando a cabo el goce de sus derechos sin transgredir la vida o estabilidad de la mujer que accede a este servicio. Estos acompañamientos se dan de manera gratuita y frente a una red feminista que está en toda la República Mexicana.
Las muertes de mujeres en abortos clandestinos, por el estereotipo y rol de género del deber ser madre, es responsabilidad del Estado, pues éste no brinda medidas de prevención ni acceso a la salud pública, otro derecho, que por ende les corresponde a las mujeres. La Ley General de Acceso a las Mujeres a una Libre de Violencia en México, señala en su Artículo 21, Capítulo V, que la violencia feminicida es “la forma extrema de violencia de género contra las mujeres, producto de la violación de sus derechos humanos, en los ámbitos público y privado, conformada por el conjunto de conductas misóginas que pueden conllevar impunidad social y del Estado y puede culminar en homicidio y otras formas de muerte violenta de mujeres”.
“En México hay 98 mujeres encarceladas por abortar y muchos de esos abortos fueron espontáneos. Es necesario que la ley nos respalde y sancione a quienes pongan trabas porque decidir cuándo y sí queremos ser madres es parte de nuestros derechos reproductivos”. Además de que no todas tienen acceso a un aborto médico. “Tiene que regularizarse su práctica para que ninguna mujer muera por abortos mal practicados ni se les señale o estigmatice. Algunas de las mujeres detenidas por abortar enfrentan juicios por homicidio en razón de parentesco, mientras que los feminicidas que matan y violan a sus hijas están libres, o los que golpean a las esposas para provocarles abortos también están libres.
El único temor es a no luchar
Antes de iniciar la marcha hacia el Hemiciclo a Juárez, entre 10 a 15 sujetos identificados como integrantes del grupo Pro-vida o la Ola Celeste se hicieron presentes en el Monumento a la Madre con un paliacate azul y con un lenguaje corporal intimidatorio y violento.
“Son ellos quienes nunca levantan la voz sobre los feminicidios, desapariciones, niños y niñas en situación de calle. Lo único que les importa es decidir sobre nuestros cuerpos (…) pero el único temor que tenemos es a no luchar”, dijo aludiéndolos una integrante de la Organización Rosas Rojas.
Si bien esta provocación a quienes salieron a exigir un derecho no pasó a mayores, en las redes sociales es muy diferente. Los comentarios de júbilo por parte de personas Pro-vida o profeto, como también les llama, en contra de las mujeres que están en constante lucha por los derechos de las mujeres rebosan de violencia: “ganamos”, “malditas asesinas, las hubieran abortado”, “importan las dos vidas”, “putas”, “dejen de abrir las piernas”.
Sin embargo, la victoria real es de las mujeres argentinas que lanzaron la histórica Marea Verde y contagiaron a otras de Ecuador, Brasil, Perú, Uruguay, El Salvador, España, Chile y México para luchar por un derecho fundamental: decidir sobre nuestro propio cuerpo y la maternidad libre.
Mta. Teresa C. Ulloa Ziáurriz
Directora de la Coalición Regional contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y el Caribe, (CATWLAC por sus siglas en inglés).